Como Tomar El Polen: Niños, Jóvenes Y Adultos



Pese a que cada vez lo vemos con mayor frecuencia comercializado alrededor del mundo, el polen de abejas, hoy por hoy, es uno de los productos que la mayoría de las personas no utiliza en su día a día. Por esta razón, hoy te indicaremos cómo tomar el polen para que empieces a asimilar cada uno de sus maravillosos compuestos.





Para que te animemos por completo a incluirlo definitivamente en tu dieta, también te reseñaremos los principales beneficios que acarrea su consumo en tu organismo. Pero, puesto que muchos no saben a ciencia cierta qué es, primero aclararemos su definición.

¿Qué es el polen?

como consumir polen

Polen

El polen no es más que el alimento que recogen las abejas para ser elaborado en su “fábrica de producción” como producto de consumo y que proviene de las plantas. En esencia, este viene en presentación natural en gránulos anaranjados que, sorprendentemente, contiene casi todos los aminoácidos esenciales que necesita el ser humano. En total, este posee 22 de estos compuestos vitales.

¿Cómo tomar el polen?

Para poder percibir todo lo que se ha descrito se debe tener en cuenta varias cosas a la hora de consumir el polen: lo primero, y más importante, es que no debemos ingerirlo entero, pues así nuestro cuerpo no se beneficia en los más mínimo. Por tanto, debemos optar por sus presentaciones en polvo o en estado líquido.




Si, por una u otra razón lo encuentras el polen granulado (lo cual es muy usual), entonces debes proceder a molerlo o machacarlo tú mismo para los motivos correspondientes. Lo segundo, es que se deben manejar unas cantidades de consumo bien definidas. A saber, son las siguientes:

  • Niños de 3 a 5 años: 1 cucharada pequeña (equivalente a 4 gr) al día.
  • Niños de 6 a 12 años: 1 cucharada rasa (equivalente a 8 gr) al día.
  • Niños mayores de 12 años: 2 cucharadas (equivalente a 16 gr) durante el día.
  • Jóvenes y adultos: 2 cucharadas y media (equivalente a 20 gr) durante el día.

En este orden de ideas, puedes mantener este tratamiento durante 20 días seguidos tomando una cucharada en ayunas y otra en la noche (según sea el caso); luego de ello, descansarás 10 días y después puedes retomar el tratamiento nuevamente.

¿Con qué podemos combinar el polen?

Si deseas un consumo alternativo de este tipo de producto, entonces puedes utilizar algunas opciones de consumo que te dejamos en este instante:

– Con zumo de naranja

Puedes cortar un par de naranjas a las que sacarás solo el zumo, le agregarás el endulzante de tu preferencia más la cantidad indicada de polen. Lo más recomendable, en este sentido, es que lo bebas en ayunas todos los días.

– Con infusiones

Por otro lado, para combinar los beneficios del polen con los de las infusiones, puedes aprovechar al máximo ambos compuestos para tu beneficio. Dicho esto, distribuye la cantidad de cucharadas reseñadas en 3 vasos de estas que distribuirás a lo largo de tu día.

– Con bebidas de frutas

Por último, y en el mismo orden descrito, puedes incluir un poco de polen a tus bebidas frutales favoritas a las cuales agregarás el provecho de esta maravillosa sustancia.

Beneficios de consumir el polen natural

Ahora que ya conoces su terminología, es hora ya de que te sorprendas con los increíbles y variados beneficios que, con bases en los aminoácidos reseñados, el polen de abeja te otorga el empezar su consumo.

  1. Regula nuestro sistema nervioso
  2. Mejora nuestro sistema digestivo y controla a nuestro apetito
  3. Estimula a nuestro sistema inmune y ayuda a subir nuestras defensas
  4. Reduce el colesterol y los triglicéridos
  5. Mejora nuestro sistema circulatorio y cardiovascular
  6. Regula nuestro pH sanguíneo
  7. Mejora nuestra visión debido a sus altas concentraciones de riboflavina
  8. Controla los niveles de glucosa en el torrente sanguíneo
  9. Es un poderoso energizante que nos otorga la vitalidad diaria que ameritamos para nuestras actividades cotidianas

Propiedades del polen

Todo lo anterior descrito solo puede ser otorgado por la combinación de diversos compuestos que ayudan a incentivarlo. En este orden de ideas, te describimos los 4 principales.

  1. Vitaminas: incluidas la A, B1, B2, B6, C, D y E. Aunado a esto, es rico también en ácido pantonénico, nicotínico además de compuestos de colina y rutina.
  2. Enzimas: como la fosfatasa, la amilasa, la diaforasa, la dihidrogenasa láctica y la diastasa.
  3. Minerales: entre los cuales encontramos el sodio, el zinc, el potasio, el calcio, el cobre el hierro, el plomo, el azufre, el cloro y el aluminio.
  4. Aminoácidos: cuyos vectores más importantes, de los 22 que contiene, son el triptófano, la arginina, la glicina, la isoleucina, la alanina, la histidina y la lisina.

De esta forma, ahora ya sabes cómo aprovechar este producto natural en tu vida diaria. Recuerda que, después de todo, la mayoría de los compuestos que nos ofrece la naturaleza, por sí mismos, nos ayudan a lograr un equilibrio en nuestra salud.