La presión arterial alta o hipertensión es uno de los grandes contribuyentes a un porcentaje de personas que fallecen cada año por este diagnóstico. A pesar que no causa síntomas, una lectura alta en su presión genera una serie de problemas graves de salud. Aprende qué tomar para bajar la tensión y controlar los niveles altos.
¿Cuáles son los riegos de una tensión según su nivel?
Cuando una persona maneja niveles de tensión por encima de 140/90mmHg se encuentra en riesgo de padecer algún derrame cerebral y enfermedades del corazón. De igual manera, se ha demostrado que aumenta la probabilidad de padecer complicaciones entre las que se incluyen:
- Daños al músculo del corazón
- Mala circulación
- Alto riesgo de ataques al corazón
- Riesgo de accidente cerebro vascular
Sin embargo, cuanto mayor sean los niveles, más efectos secundarios pueden acarrearse como consecuencia de ello.
La hipertensión, comúnmente es llamada entre especialistas el “asesino silencioso” debido a su particularidad de no producir síntomas. Si usted es de las personas que no chequea su presión arterial con regularidad, la hipertensión podría pasar desapercibida y sin ser tratada por años.
Es importante que conozca que hay dos grandes factores de riesgo que están fuera de su control; el primero es la edad y el segundo es la genética familiar. Todo lo demás que implica un estilo de vida saludable y consiente es controlable.
La presión arterial alta puede ser ocasionada por una gran variedad de causas. Entre las más comunes se encuentran:
- Genética
- Falta de ejercicio
- Alcohol
- Mala alimentación
- Estrés
- Ciertos medicamentos
- Edad
7 Remedios naturales para bajar la tensión arterial
Quienes padecen de hipertensión a menudo necesitan varios medicamentos para controlar su condición. Por fortuna, existen remedios naturales para bajar la tensión arterial, si usted o alguien que conoce padecen de niveles descontrolados podrían conseguir solución con las siguientes bebidas para bajar la tensión:
- Jugo de remolacha: poseen una gran fuente de potasio y ácido fólico; importantes en el control de la presión arterial. Contiene además nitritos que relajan el tejido muscular y aumentan el flujo sanguíneo.
Para hacer el mejor de los batidos para bajar la tensión necesita:
- Una remolacha pequeña
- Una manzana grande
- Dos tallos de celery
- Media zanahoria
- Jugo de un limón
- Una cucharadita de jengibre rallado
Agregar los ingredientes a una licuadora o procesadora y añadir hielo antes de disfrutar.
¿Cómo bajar la tensión alta con jugo de remolacha?
- Tomar una o dos tazas de jugo diarias podrían reducir la presión arterial significativamente. Esta bebida resulta igual de eficaz que los fármacos con nitrato para el tratamiento de la hipertensión.
- Leche baja en grasa: por su fuente potasio y calcio, están relacionados directamente con la presión arterial saludable. La sustitución de lácteos bajos en grasa disminuye los niveles de tensión.
- Jugo de arándanos: disfrutan de propiedades antioxidantes y antiinflamatorias potentes que previenen y reducen los daños dentro de los vasos sanguíneos, disminuyendo el aumento de la tensión.
- Agua: ingerir una cantidad adecuada de agua es el mejor de los remedios para bajar la presión, es una las formas más saludables, de bajo costo y más eficaz para reducir la tensión.
- Expertos recomiendan ingerir al menos 8 vasos de agua por día.
- Jugo de manzana: por su alto contenido en antioxidantes inhiben un compuesto en el organismo que forman un papel muy importante en la constricción de los vasos sanguíneos.
- Té de hibisco: es una de las mejores infusiones para bajar la tensión. Los antioxidantes que posee mantienen los vasos sanguíneos resistentes a los daños que se ocasionan cuando se padece de esta condición.
¿Cómo preparar té de hibisco?
- Llevar a hervor dos tazas de agua
- Agregar media taza de flores de hibisco secas o frescas
- Tapar y dejar reposar
- Colar y agregar un poco de miel, jengibre rallado o jugo de limón si lo desea
Para obtener todos los beneficios del hibisco, se recomienda:
- Tomar al menos dos tazas en el día
- Preparar té fresco cada día
- Dejar reposar la bebida durante al menos seis minutos antes de beber, bien sea caliente o frío
- Jugo de granada: actúa como inhibidor natural de las enzimas que aumentan la tensión, ejerciendo una solución similar a la clase de medicamentos prescritos para tratar esta condición y la insuficiencia cardíaca.
- Se recomienda beber seis onzas de zumo de granada sin azúcar a diario. Si le resulta muy dulce esta opción, puede diluir la mitad del jugo en agua.
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Soluciones caseras para bajar la tensión arterial
Afortunadamente, existen medidas más allá de los fármacos que pueden colocar los médicos cuando se ha sido diagnosticado con presión arterial alta. Muchas veces tomar un estilo de vida diferente y mejorar hábitos de vida ayudan a controlar la tensión.
El estilo de vida juga un papel fundamental en el tratamiento de la hipertensión. Si logra hacer un cambio y toma algunos hábitos saludables para bajar la tensión es posible retrasar o reducir la necesidad de la medicación. Algunos de esos hábitos incluyen:
- Ejercitarse con regularidad
- Reducir la ingesta de sodio
- Aprender a controlar y reducir el estrés
- Mantener un peso adecuado
- Evitar la cafeína
- Consumir alimentos para bajar la tensión como: bananas, papas con piel, salmón, avena, jugo de naranja, yogurt bajo en grasa.
- Evitar fumar
- Practicar yoga
- Reducir la ingesta de bebidas alcohólicas
Entre las frutas y verduras para bajar la tensión arterial se encuentran: verduras de hoja verde como la lechuga romana, rúcula, col rizada y espinacas. De igual manera los arándanos, frambuesas y fresas previenen la hipertensión y reducen la presión arterial.
Conclusión
- Mantener los niveles de presión arterial saludables para reducir las probabilidades de padecer otras enfermedades.
- Chequear la presión arterial con regularidad
- Seguir las recomendaciones del especialista si es diagnosticado hipertenso
- Consultar con su médico tratante antes de cambiar su plan de tratamiento
Es recomendable mantenerse al pendiente del cuidado de su salud. El especialista podría prescribirle suplementos, medicamentos o cambios en su alimentación o rutina de ejercicios.